Ser o no ser, he ahí el dilema.

RNA.28/01/14

Algunos eruditos etílicos postulan el origen del Dry Martini, en la tierra de Shakespeare, aunque cambiando el Globe por el Hotel Savoy. Concretamente citan a Thomas Stuart, barman del American Bar del londinense Hotel, como el “inventor”en 1886 del cóctel más famoso del mundo. Mezcló ginebra Plymouth con vermut Noilly Prat, corteza de limón y hielo.

De aquí a la eternidad!
De aquí a la eternidad!

La proporción... ja, ja, ja!!! He ahí el dilema.

La proporción de un Dry Martini tiene tantas interpretaciones como los manuscritos del Mar Muerto. Para nosotros una mezcla de 4 a 1 es razonable. La copa bien fría, los hielos en el vaso mezclador gélidos y el pulso que no tiemble, que ya lo hará el cliente cuando vea que su copa, mate por el hielo, y rasante de contenido, no admite vacilación a la hora de bebérselo.